Una de las acciones más importantes, para mantener un acuario en buen estado, reside en la correcta aclimatación de los ejemplares adquiridos. El agua en la que llega el animal será diferente a la que tienes en el acuario. Piensa que los animales están acostumbrados a la estabilidad de las instalaciones en las que estaban y que ahora al cambiar las condiciones esas diferencias que les pueden causar un shock o, en algunos casos, hasta la muerte. De ahí la importancia de llevar a cabo una buena aclimatación
Todos los peces, corales e invertebrados son muy sensibles a la temperatura, la salinidad y el pH.
Esos son los 3 factores claves a vigilar. Veamos las razones, antes de aclimatar pues ayudará a los animales.
Temperatura: las bolsas de transporte han viajado desde el almacén hasta tu casa y, seguramente, el agua tendrá una temperatura diferente a la del acuario principal. El procedimiento de aclimatación facilitará que el cuerpo del animal se ajuste, poco a poco, a la temperatura de tu acuario.
Salinidad: Es la gravedad específica del agua. Cuando hay una salinidad baja, el pez está recibiendo más cantidad de oxígeno al respirar. Si la salinidad del acuario es mayor de lo normal, el pez estará más expuesto a enfermedades como el punto blanco. Debe mantenerse una salinidad entre 1019 y 1022 para acuarios sólo de peces y de 1025 – 1028 si existen corales y tridacnas. Los acuarios de arrecife precisan de mayor salinidad para el crecimiento óptimo de corales.
pH: debe mantenerse entre 8,2 y 8,4. Los cambios de agua y el pH Buffer ayudarán a mantener esos niveles. Cuando el pez produce amoniaco, se produce una caída del pH. Una aclimatación suave ayuda a normalizar el pH.
Aclimatar significa acostumbrar a una nueva situación al animal.
Es un proceso que lleva su tiempo pero que, al final, provocará que el animal no sufra stress y se adapte a su nuevo hogar, consiguiendo que el ejemplar esté sano y luciendo sus colores naturales.
Existen unas reglas de oro previas que debes conocer;
1) Paciencia. El proceso debe desarrollarse en, al menos unos 30 – 40 minutos.
2) Apagar las luces del acuario durante 3 o 4 horas, desde el principio de la aclimatación o la introducción del pez.
3) Intenta que la luz de la habitación donde está el acuario, sea lo más débil posible.
4) Si ves que el pez no se mueve o se sitúa al fondo de la bolsa de trasporte, no te preocupes pues puede ser causa del stress o de una baja temperatura. Una vez introducido en el acuario tardará algo en adaptarse a su nuevo hogar.
Existen varios métodos para aclimatar, que ayudarán a los nuevos peces a recuperarse del stress ocasionado por el transporte.
Método de flotación
Este método te permite aclimatar cualquier tipo de animal y busca lograr la aclimatación a todos los factores descritos de forma suave. No tengas prisa y lograrás el objetivo, una buena aclimatación.
Método de goteo
Este método puede ser utilizado para casi todos los animales y lleva más tiempo más infraestructura.
Otro de los procesos que llevaremos a cabo al mantener un acuario de arrecife es, sin duda, la aclimatación de corales.
De nuevo, se recomienda paciencia como la clave del éxito pues causará menos stress al animal y tendrá ejemplares con buena salud.
Los corales blandos, pólipos y discosomas vienen, generalmente, pegados a una roca cuando los compras.
Deben cogerse solo por esa roca intentando no tocar los pólipos. Lo mismo debe suceder con los corales duros. Se recomienda el uso de guantes pues reducirá la posibilidad de irritación y de stress al tocarlos.
La aclimatación a la luz es, igualmente, clave. Al existir diferentes tipos de corales, sus necesidades son también distintas. Algunos son más sensibles que otros en términos de condiciones de luz idóneas.
Piensa que les llevará algo de tiempo aclimatarse a la luz así que, a ser pacientes.
Los pasos a seguir son los siguientes;
1) Apagar la luz del acuario para aclimatación suave a las condiciones de luz
2) Mantener cerrada la bolsa de transporte, flotando en el acuario principal durante, al menos, 15 minutos. El objetivo es lograr uniformidad de temperatura.
3) Abrir la bolsa
4) Echar 50ml (aprox ¼ taza de café) de agua del acuario principal.
5) Repetir el proceso anterior tantas veces como sea necesario hasta llenar casi la bolsa.
6) Colocarlos en la parte más baja de acuario, con las luces apagadas
7) Dejarlos así durante unas 2 horas. No te pongas nervioso queriendo encender la luz. Paciencia.
8) Pasado este tiempo, encender ya las luces y colocarlo ya en la posición deseada y acorde a las necesidades de cada animal
9) Vigilar durante unos días para ver si se expande totalmente por si requiere de más o menos luz.
Es importante que tengas claro que necesidades de luz tiene cada animal así como de la corriente y requerimientos nutricionales.
Igualmente, debes tener claro si son corales agresivos o no con otros.
Atención: las gorgonias y las esponjas no deben tener contacto con el aire. Debe seguirse el proceso normal de aclimatación pero, una vez concluido el mismo, debes sumergir la bolsa dentro del acuario y sacar la esponja de la bolsa bajo el agua.
Los caracoles, cangrejos, gambas y estrellas deben seguir un proceso de aclimatación más largo que los peces y corales. Son los animales más frágiles, pues a la hora cambiarlos de hábitat son muy sensibles a los cambios de Salinidad y pH.
Deben aclimatarse muy despacio durante unas 2 horas aproximadamente. Hay que tener paciencia y no tener prisa.
Antes de nada, debe igualarse la temperatura del agua de la bolsa de transporte a la del acuario. Para ello, puede colocarse la bolsa dentro del acuario durante unos 15-30 minutos. Las luces deben apagarse durante el proceso de aclimatación.
Una vez lograda una temperatura similar, colocar los invertebrados (de forma separada si son varios) en un contenedor. Puede seguirse el método de goteo colocando los invertebrados en un contenedor. El ratio de 1-2 gotas por segundo durante unas 2 horas sería correcto. La idea es que el agua del acuario doble la que venía con la bolsa y se retire, en ese momento, la mitad del agua. Luego, reiniciar el proceso de goteo.
Las estrellas de mar y los erizos deben colocarse sin que tener contacto con el aire. Debe colocarse el contenedor en el acuario y desde ahí sacar al invertebrado. La salinidad óptima para muchos invertebrados está entre 1023 y 1025.
Los peces normalmente, tendrán respiración rápida y pueden tumbarse sobre un lado en el contenedor de aclimatación (o bolsa). Esa situación es normal y el pez se recuperará sin problemas.
Los Corales y anémonas, tienden a “desinflarse” y tardarán varios días en recuperarse totalmente.
Los caracoles y cangrejos pueden no moverse durante horas y deben vigilarse por si alguno no pasó el proceso de aclimatación.
Las estrellas deben, igualmente, vigilarse pues pueden pasar varias horas antes de que se empiecen a mover.
Siempre a vuestra disposición.